Mozart y Salieri
(N. Rimski-Kórsakov)
Fundación Juan March - Madrid (España)
Palacio de Hualles, Festival Internacional de Santander - (España)
La idea de puesta propone un viaje a partir de aquella imaginaria noche de tormenta (presente) en la que Salieri decide cumplir su destino de eliminar a Mozart de la historia y se extiende en un tiempo después de los hechos sucedidos, donde se expone la duda ¿Ha cometido Antonio Salieri aquel asesinato?
La obra nos invita a revivir esta doble tragedia de una muerte y una vida, para reflexionar más allá de la anécdota a la que se reduce la obra.
Por un lado, la muerte de Mozart por la que aún hoy nos inunda un sobrecogimiento al imaginar la soledad de su entierro o al intentar entender las claves de su muerte. Por el otro, la vida de Antonio Salieri, una vida marcada por la gloria y el infortunio, cuyo mayor pecado, tal vez, fue vivir demasiado para ver y ser consciente de su declive artístico e intelectual, reforzado todo ello por la culpa y el remordimiento de una muerte, la de Mozart, cuyo principal móvil, la rivalidad entre ambos, lo convirtió en el principal sospechoso.
Lejos de aquella noche de 1791, en la débil mente de Antonio Salieri ya no hay música sino confusas imágenes que lo han marcado para siempre. Imágenes de una noche que se repiten una y otra vez en su mente hasta el delirio, como un intento de enfrentarse a aquellos recuerdos que lo aterran o tal vez, de convencerse de que aquella noche fatídica nunca existió.
Llueve. Afuera hace frío, el viento y la lluvia se empeñan en borrar todos los caminos.
Es 1791 de una tarde cualquiera de octubre, en Viena.
Comienza la ópera.
Fotografías: Dolores Iglesias - Archivo Fundación Juan March